• 12/05/2023

Hago mal en decirlo

Hago mal en decirlo

POR GUSTAVO RUCKSCHLOSS

Un día, un sobrino me pescó escribiendo. Sí, escribiendo a mano; es decir “manuscrito”, que hasta el término suena añejo. Estuvo un momento viéndome y se animó a decirme que eso era antiguo; que por qué no escribía en la computadora. Armándome de paciencia le dije que porque así había aprendido y que me sentía cómodo; que para mí era un desafío ver el papel en blanco invitándome a mancharlo con ideas; que, como no soy muy veloz, las palabras salían a la velocidad de mis pensamientos y eso disimulaba mis tiempos. Además me gusta ver cómo de mi mano sale esa caligrafía casi linda que me acompaña desde hace mucho.
Entonces me preguntó dos cosas: qué era caligrafía y cuánto hacía que escribía. Le expliqué qué es caligrafía, mientras mi interior lamentaba que ni hoy. Además le dije que con regularidad, y siempre a mano, llevaba bastante más de treinta años escribiendo algo. Se quedó callado y entonces le pregunté: y vos, con la compu ¿escribís mucho? Siguió callado y cuando tomó coraje, me dijo que no, que era para meterse en internet, jugar e interactuar en las redes, pero nunca se le hubiera ocurrido escribir.
Creo que no hace falta decir que me dolió su respuesta y aunque hago mal en decirlo……me encanta la magia que, de mi mano, salgan pensamientos.