• 07/10/2023

Premio Nobel para los pro vacunas

Premio Nobel para los pro vacunas

POR GUSTAVO ALCALÁ

Octubre de 2023 es otro mes importante para las mujeres y niñas de todo el mundo. Los aportes científicos pasados y presentes han generado proyectos y descubrimientos que han ayudado a la humanidad pero la historia ha marginado a las mujeres de la ciencia y la tecnología y particularmente de los premios Nobel.

Surgido por el testamento del empresario sueco Alfred Nobel, firmado en noviembre de 1895, quien se sentía culpable por su responsabilidad como empresario enriquecido a través de la industria productora de dinamita. El principal mercado: la minería pero ha sido la guerra durante mucho tiempo.

Brecha de género en Fisiología y Medicina

De los 230 premios en esta disciplina, solamente 13 han sido ganados por mujeres (el 5,6% de los laureados). No es medicina la excepción, la distribución en física premió a 1,8%, Química 4,1% de las veces a mujeres. Fuera de la ciencia han tenido más reconocimiento: 14,3% en literatura y 16,3% las veces en la paz han recaído en mujeres. Para cerrar la lista 2,17% han obtenido el premio Memorial Nobel en Ciencias Económicas instaurado en 1968 por el Sveriges Riksbank en memoria de Alfred Nobel.

Investigaciones sobre empleo de ARN mensajero

Aunque tienen apenas 200 años de historia las vacunas,, junto al agua potable y los antibióticos, han sido el avance tecnológico más importante en salud protegiéndonos de enfermedades que resultaban antes en muertes seguras en un porcentaje importante de casos. La evolución en métodos cada vez más eficaces para protegernos ha permitido la vacunación mediante ARN mensajero.

Katalin Karikó húngaro-estadounidense

Creció en un pequeño pueblo sin agua potable, heladera ni televisor, nació en 1955, hija de un carnicero y una contadora sobresalió ya en la escuela primaria ganando el tercer premio nacional en una competencia de biología. En 1982 obtuvo el doctorado en bioquímica en la Universidad de Szeged trabajando en el Centro de Bioquímica e Investigaciones Biológicas húngaro. Estuvo en la lista de la policía secreta comunista como capital científico por lo que fue chantajeada, según ha contado, con posibles represalias contra su padre o consecuencias para su carrera. En 1985 el laboratorio en el que trabajaba se quedó sin presupuesto y ella buscó trabajo en otros países.

En 1997 conoció a Drew Weissman, ambos comprendían la importancia del ARN mensajero y se dieron cuenta de cómo podría llegar a revolucionar el mundo. Las vacunas contra el COVID lo demostraron.