• 09/09/2023

Confusiones conceptuales

Confusiones conceptuales

POR EDUARDO QUATTROPANI

Se han instalado algunas confusiones conceptuales con entidad suficiente para desnaturalizar la organización judicial y, tal lo venimos perfilando, desdibujar la figura del Juez, así:

I. Supuesta “Unidad Conclusiva de Causas”

Ejemplo de ello es el haber instalado que una causa radica en una supuesta Unidad Conclusiva, manejada por quienes no son Jueces.

Ello, en la realidad legislativa (nótese, digo legislativa) es una enorme inexactitud, pues supone que han desaparecido los Juzgados, cuyos titulares eran (¿son?) los Jueces Correccionales y de Instrucción, que pasaron a ser Jueces de Garantías en el Sistema Acusatorio.

La verdad, jamás desaparecieron, sólo que ahora son subrogados, ello en teoría, pues las causas, en la realidad de los hechos, las manejan los encargados de la poca clara “Unidad Conclusiva”, es decir, un aparato administrativo que no depende ni se reporta a los Jueces.

II. Desnaturalizado “Colegio de Jueces”

Otro ejemplo de confusión de conceptos es el llamado “Colegio de Jueces”, al que se lo presenta como la reunión o asociación corporativa de los Jueces de Garantías, con personalidad propia, y que sintetizaría o resumiría la opinión o posición de los magistrados.

Sostener ello es tal como herir de muerte el concepto de Juez, es desnaturalizar la organización judicial, es confundir un método de distribución de tareas con un espíritu asociativo o corporativo. Todo impropio.

En ocasiones se comete, en los discursos y en las posturas, la grave confusión de asimilar el pretendido “Colegio de Jueces” al “Grupo de las Camperas” de los jóvenes de la secundaria.

III. Asesores Jurídicos del supuesto “Colegio de Jueces”

Y ya instalado ese supuesto “Colegio de Jueces”, aparece la figura de los Asesores Jurídicos del Colegio de Jueces, los que, en la realidad (se ha cuidado mucho que así sea) no dependen ni se reportan con los Jueces; no dependen administrativamente de estos, sino del aparato administrativo y hasta participan en ocasiones de reuniones con los magistrados.

Adviértase que ha mutado, en el trato diario, el concepto de “Secretario letrado” por el de “Asesor Jurídico”. Toda una señal.

Tengo claro, estas columnas no cambiarán, por sí, el curso de los acontecimientos. Tan claro como que cuando se presume advertir desvíos o desconceptualizaciones tan peligrosas, hay que decirlo con todas las letras.