• 11/11/2023

La futura reina de España cumplió 18 años

La futura reina de España cumplió 18 años

LEONOR DE BORBÓN Y ORTIZ, LA NIÑA QUE SE CONVIRTIÓ EN HEREDERA DE LA CORONA

Parece que fuera ayer. Pero han pasado 18 años desde que los medios de todo el mundo, pero especialmente los de España, anunciaran que había nacido Leonor de Borbón y Ortiz.

Fue en Madrid, el 31 de octubre de 2005 a la 01:46 horas en el Hospital Ruber Internacional de Madrid. Pesó 3,54 kilogramos y midió 47 centímetros. Su padre declaró que se llamaría Leonor «porque tiene muchos vínculos históricos y nos gustaba».

Hasta acá parecería un hecho normal, similar a los de miles millones de seres humanos que pueblan el planeta.

Pero no era así. Leonor nació durante el reinado de su abuelo, el rey Juan Carlos I. Y en 2014, cuando su padre fue proclamado rey tras la abdicación de su abuelo, Leonor se convirtió en heredera de la Corona, asumiendo los títulos tradicionales inherentes a esta condición, a saber: princesa de Asturias, princesa de Gerona, princesa de Viana, duquesa de Montblanch, condesa de Cervera y señora de Balaguer. Como si esto fuera poco automáticamente pasó a ser presidenta de honor de la Fundación Princesa de Asturias y de la Fundación Princesa de Girona.

En otras palabras, nació para ser reina. Y así ha sido criada hasta ahora. Pero desde que nació fue centro de muchas polémicas. Primogénita de los entonces príncipes de Asturias, Felipe de Borbón y Letizia Ortiz, y séptima nieta de los reyes Juan Carlos I y Sofía —la tercera niña—, se convirtiéndose en infanta de España y segunda en la línea de sucesión a la Corona.

Su nacimiento reabrió un debate sobre la sucesión establecida en la Constitución, que prefiere a los varones sobre las mujeres. El Gobierno, presidido por José Luis Rodríguez Zapatero en aquellos momentos, manifestó su intención de reformar este y otros tres aspectos de la Carta Magna. A pesar del consenso social, finalmente no se llevó a cabo dicha reforma, ya que se tendría que realizar por el procedimiento agravado: sería necesaria su aprobación por las Cortes Generales, su disolución, la convocatoria de elecciones, la ratificación de la modificación por las nuevas Cortes y un referéndum.

 El presidente del Consejo de Estado aseguró que los cambios podrían realizarse con carácter retroactivo «aunque fuera niña y naciese antes de que la reforma se efectuase», aspecto en el que discrepan expertos en derecho constitucional. España es una de las monarquías parlamentarias europeas, junto con Mónaco y Liechtenstein, que penaliza a la mujer en la línea sucesoria.

Pero en la vida casi todo tiene arreglo. Y Leonor fue bautizada el 14 de enero de 2006 en una ceremonia en el Palacio de la Zarzuela oficiada por el arzobispo de Madrid, a la que asistieron algo más de ochenta personas. Se utilizó una pila bautismal románica, empleada en los bautismos de príncipes e infantes españoles desde el siglo XVII y utilizada originalmente por santo Domingo de Guzmán, así como agua del río Jordán. Sus padrinos fueron sus abuelos paternos, los reyes. Recibió el nombre de pila de Leonor de Todos los Santos.

Cursó sus estudios primarios y secundarios en el Colegio de Santa María de los Rosales de Madrid, el mismo colegio en el que se educó su padre. Tras finalizar la educación secundaria, realizó un Bachillerato Internacional en el UWC Atlantic College de Gales (Reino Unido). En agosto de 2023, Leonor empezó sus tres años de formación militar en la Academia General Militar.

La Reina Emérita Sofía, la princesa Leonor y la Infanta Sofía, durante la celebración de la entrega del premio Príncipe de Asturias, en octubre pasado

Los interrogantes de la princesa

El tiempo pasó y Leonor ya ha cumplido 18 años.

La mayoría de edad alcanzada por la princesa Leonor y su juramento de la Constitución en el Congreso abren una nueva etapa en su trayectoria como heredera al trono, en la que tiene por delante diversos retos en cuanto a su proyección institucional y su formación académica.

El Rey impone el Collar de la Real y Muy Distinguida Orden de Carlos III a Su Alteza Real la Princesa de Asturias en el Palacio Real de Madrid.

Estos son algunos de los interrogantes que rondan sobre los próximos pasos de la princesa de Asturias:

Leonor de Borbón no cobra ninguna retribución pública, que por ahora solo tienen Felipe VI y las reinas Letizia y Sofía, después de que se le retirara a Juan Carlos I en 2020. Es una decisión del rey determinar a partir de qué fecha su hija pasará a contar con una partida procedente del presupuesto de la Jefatura del Estado.

La Casa del Rey no prevé a corto plazo crear en su organigrama una estructura propia para la heredera que la apoye en su labor representativa.

En el caso de su padre, la Secretaría del príncipe se creó en 1995, con 27 años, al terminar su formación académica, y al frente se situó a Jaime Alfonsín, quien pasó a ser jefe de la Casa del Rey tras la proclamación de Felipe VI en 2014. “Está en plena formación. Cuando acabe, será el momento de diseñar un plan como el de su padre”, señalan fuentes del Gobierno.

Leonor de Borbón aún no ha protagonizado ningún viaje institucional al extranjero. Su padre lo hizo en 1983 a Colombia con 15 años, en representación de Juan Carlos I, en el 450 aniversario de la ciudad de Cartagena de Indias, en el que coincidió con una quincena de mandatarios iberoamericanos.

La princesa, junto a la infanta Sofía, estuvo en Brentford (Inglaterra) en julio de 2022 para presenciar un partido de España en la Eurocopa femenina de fútbol, una cita catalogada como oficial, pero sin peso institucional.

También estuvo dos años en un internado en Gales (Reino Unido) para estudiar bachillerato y viajó a Estados Unidos durante dos veranos, en 2018 y 2019, para ir con su hermana a un campamento juvenil.

En el horizonte, no se atisba por ahora cuándo relevará a su padre en las tomas de posesión de presidentes latinoamericanos, que don Felipe empezó a asumir con 27 años en 1996.

La heredera al trono comenzó su adiestramiento militar el pasado 17 de agosto en Zaragoza, primera etapa de un periodo de tres años que incluirá la Marina y el Ejército del Aire

La heredera al trono comenzó su adiestramiento militar el pasado 17 de agosto en Zaragoza, primera etapa de un periodo de tres años que incluirá la Marina y el Ejército del Aire. Se da por hecho que proseguirá su formación en la Universidad, con la incógnita de si emulará o no a su padre, quien estudió en la Autónoma de Madrid, y de cuál será su programa académico.

Después es previsible que haga un máster en el extranjero, al estilo del que su padre hizo en Georgetown (Estados Unidos) en Relaciones Internacionales.

Otra de las asignaturas pendientes es cómo planteará su relación con otras casas reales, en algunas de las cuales hay herederos de su generación, como es el caso de Bélgica, Noruega, Holanda, Dinamarca o Marruecos.

Leonor de Borbón no ha participado hasta ahora en ningún evento con otras monarquías, ni en solitario, ni con sus padres.

Leonor de Borbón no tiene cuenta personal en ninguna red social, una de las principales vías donde se informan los jóvenes. Los actos familiares e institucionales de la princesa se canalizan a través de las cuentas oficiales de la Casa del Rey -X (antes Twitter) y YouTube- sin que por ahora se conozcan planes para que tenga un canal propio como otros príncipes herederos.

La Casa Real Española ha publicado la fotografía oficial de la Princesa Leonor

Las anteriores reinas españolas

 

María Luisa de Parma, 24 embarazos y 14 hijos

Lista, ambiciosa, decidida y aficionada al lujo, la reina tuvo al menos 24 embarazos y 14 hijos… No consta que fueran todos ellos de Carlos IV. Tal desgaste físico acabó con sus dientes, aunque se mandó a hacer una dentadura postiza en porcelana blanquísima con la que epataba en las fiestas y saraos, a los que era sumamente aficionada. Llegó a ser tildada como la “María Antonieta española”, aunque María Luisa de Parma murió en el exilio. Aprovechó el desinterés de su marido por el gobierno para mandar a su antojo con su más renombrado amante, Manuel Godoy.

Julia Clary, la reina que nunca llegó

La primera reina burguesa que ocupó el trono de España procedía de una rica familia de Marsella. En los alborotados años de la revolución francesa el azar la cruzó con José Bonaparte, el hermano abogado y diplomático del general y emperador. Se casó con él por amor, pero era la cuñada de Napoleón…Pequeño detalle que la hizo dos veces reina, primero de Nápoles, después de España, cuyo trono habían entregado al emperador francés Carlos IV y Fernando VII. Y Napoleón se lo pasó a su hermano José. No calcularon los hermanos Bonaparte que, si bien los reyes españoles entregaban la corona con displicencia, a los españoles les dio para guerrear para defender el reino. Aconsejaron a Julia que no pisara el suelo patrio. Pero fue reina de España cinco años.

María Isabel de Braganza, “fea, pobre y portuguesa”

Ese fue el piropo con el que fue recibida en el Palacio Real a su llegada a Madrid para convertirse en la segunda esposa de Fernando VII, que antes de acceder al trono, ya había enviudado sin descendencia, tema que realmente le ocupaba. De ahí la boda con su sobrina, la princesa portuguesa de 19 años, que no traía ni traje de novia. Pero era una chica prudente y agradecida que enseguida proporcionó una heredera, aunque la niña murió a los cuatro meses. Con su segundo embarazo llegó la tragedia. En la Navidad de 1818, cuando la reina va a dar a luz, pierde el conocimiento y diagnostican su muerte. Los médicos y el propio rey autorizaron una cesárea para sacar al fruto de su vientre. Era una niña que murió minutos después. En la calle la versión fue distinta: a la reina le practicaron la cesárea estando aún viva y su grito de dolor sacudió el palacio. Tenía 21 años. No dejó un heredero, pero sí el proyecto del Museo del Prado.

María Josefa Amalia de Sajonia, la niña asustada

La joven María Josefa había quedado huérfana de madre a los dos meses. Creció entre las enseñanzas de un convento y los correteos por los verdes campos de Sajonia. Era culta, pía, ingenua y dulce como una Madonna. A punto de cumplir los 16 la casaron con Fernando VII. Nada sabía la nueva reina de España acerca de las obligaciones maritales. Al punto que, la noche de bodas echó al marido de la alcoba ante sus pretensiones carnales.  Finalmente, María Josefa, Pepita, abrió la alcoba a Fernando. Nunca quedó embaraza de Fernando VII, pero hasta su ** muerte de pulmonía con 26 años** formaron una pareja más o menos tranquila y unida sobre todo por sus fervores ultraconservadores y absolutistas. 

María Cristina de Borbón-Dos Sicilias, la reina gobernadora

Otra sobrina carnal de Fernando que se convierte en su mujer. Napolitana, fértil y poco mojigata María Cristina enseguida quedó embarazada de dos niñas, Isabel y Luisa Fernanda. Fernando VII atacado de gota, ya no estaba para seguir procreando y en el lecho de muerte anuló la ley Sálica que impedía reinar a las mujeres. María Cristina había cumplido. Quedó viuda con 23 años y dos niñas. Tres meses después de enterrarle se casó en secreto con un apuesto guardia de corps, con el que a hurtadillas formó una gran familia por amor. Sin renunciar a los beneficios del cargo: no hubo negocio en España del que no sacaran suculentos beneficios la reina gobernadora y su segundo esposo, que de guardia pasó a duque de Riánsares.

Isabel II, la reina niña

La única reina de España. Abandonada por su madre, nombrada heredera a los tres años creció junto a su hermana Luisa Fernanda en un palacio hostil, fue una niña consentida, inculta, frívola, y adulada por políticos y cortesanos. Con 13 años prestó juramento como reina constitucional, pero todo empeoró cuando decidieron elegirle marido. Las ambiciones de su propia madre, los intereses políticos de la reina Victoria de Inglaterra y Luis Felipe de Francia, organizaron su boda con su primo, Francisco de Asís, que no solo era homosexual, además padecía de hipospadias, lo que le impedía mantener relaciones sexuales. Isabel aceptó, pero no renunció al sexo. Tuvo varios hijos con diferentes amantes, aunque oficialmente fueran del rey consorte. Su reinado fue un desastre y una revolución la echó del trono. Murió en París con 74 años. 

María Vitoria dal Pozzo, la reina de las lavanderas

El destino trágico persiguió a la aristócrata piamontesa desde la cuna. Inteligente, cultivada, religiosa, solidaria. El azar la hizo reina de España. Se había casado con el príncipe Amadeo de Saboya que no estaba llamado a ocupar trono alguno. Pero España estaba manga por hombro, con una revolución en marcha, y el general Prim buscaba un rey por Europa. Puso sus ojos en los Saboya. La pareja real llegó con cautela y respeto, con el propósito de modernizar y democratizar el país y acabar con las frivolidades de la corte. Pero la nobleza española se empeñó en humillar y amenazar a la reina, que logró ser gran amiga de Concepción Arenal. Se ocupó de las mujeres que lo necesitaban y abrió para ellas y sus hijos el asilo de las lavanderas.

María de las Mercedes de Orleáns, la de la copla

Se casó enamorada de su primo hermano Alfonso de Borbón, rey de España gracias al fracaso del propio padre de Mercedes, el duque de Montpensier que gastó vida y fortuna en ceñir la corona de España. María de las Mercedes creció en el palacio sevillano de San Telmo, donde sus padres formaron “la corte chica”. El romanticismo que envolvió su historia de amor se truncó a los cinco meses de la boda, cuando la infección provocada tras un aborto acabó con su vida a los 18 años.

María Cristina de Habsburgo

Archiduquesa de Austria y reina de Hungría, tenía muy claro que el romanticismo no tenía cabida en su vida. Quedó viuda con dos niñas pequeñas y un hijo en su vientre. Fue un niño, Alfonso XIII, y salvó la corona. 

Victoria Eugenia de Battemberg, la desdichada

Había nacido en el castillo de Balmoral en Escocia y era la nieta número 32 de la reina Victoria de Inglaterra. El mismo día de su boda con el rey Alfonso XIII sufrió un atentado en la calle Mayor de Madrid. Su marido pronto se echó en los brazos de otras mujeres. Ena no solo padeció su desamor sino los reproches por ser la portadora de la hemofilia. Aun así, tuvieron siete hijos. Era una mujer hermosa cubierta de joyas y volcada en la beneficencia. El 14 de abril de 1931 abandona España junto al resto de la Familia camino del exilio. Después llegó la separación de su marido.

Sofía de Grecia, la reina de mirada triste

El pedigrí regio de la reina emérita le ha servido para sortear los obstáculos que ha encontrado en el camino de la vida. Bisnieta, nieta, hija, sobrina y hermana de varios reyes europeos, sus fuertes convicciones han estado al servicio, primero de su marido, el rey Juan Carlos, para ayudarle a consolidar el trono de España; después, supo poner buena cara ante el drama personal para apoyar la llegada al trono de su hijo. Ha dedicado la vida a trabajar como reina, como le enseñaron desde niña, con una profesionalidad a prueba de casi todo. Únicamente flaqueó tras el accidente de su marido en Botswana. Sin perder la sonrisa, solo la delata la tristeza de la mirada. 

Letizia Ortiz, reina de la televisión

La adaptación al medio de la última reina de España está siendo complicada. No lo tenía fácil. En los últimos años ha vivido, casi como una obsesión, evitar la interferencia del papel institucional en la vida privada. Madre de dos hijas, mantiene un perfil bajo como reina de España, quizá por la situación política, quizá por deseo propio. Excepto algunas citas que permanecen en su agenda, lo que más trasciende de su actividad es el nombre de sus modistos.

Fuentes: Vanity Fair, abc, La Vanguardia, Wikipedia, Hola!