Con la razón de los hechos

En la columna de hace dos semanas los aburrí con estadísticas de la Unidad Fiscal CAVIG, hoy lo haré con las de la Unidad Fiscal ANIVI, de modo de reforzar el concepto de la columna del pasado sábado en cuanto al funcionamiento de las Unidades Fiscales y el modo en que están organizadas.

A saber: total de personas atendidas 1717, total de denuncias 1717, promedio de denuncias diarias 5, promedio de consultas diarias 10. De esos números se desprende que 1312 denuncias lo han sido por abuso sexual (incluye abuso simple, abuso gravemente ultrajante y abuso con acceso carnal – figuras simple o agravadas y por aprovechamiento de la inmadurez sexual de la víctima; 24 por promoción y/o facilitación, corrupción de menores (en concurso y figura autónoma); 13 por promoción o facilitación a la prostitución – explotación; 157 por tenencia – distribución – facilitación – producción de material de abuso y explotación sexual infantil; 56 por exhibiciones obscenas; 10 por rapto; 70 por grooming y 43 actuaciones investigativas (comprenden todas aquellas investigaciones de oficio o por denuncia que pueden desencadenar o no es delito cometido).

Que vale la pena destacar que se han obtenido 547 sentencias condenatorias, se han realizado 1207 pericias psicológicas a menores, 1797 audiencias videograbadas, 110 pericias psicológicas a imputados, 1200 informes sociales a imputados, 234 informes sociales a víctimas y en consultorio se han realizado 784 exámenes médicos a menores.

Queda claro que esos números, impensados en el viejo sistema, no son fruto de la casualidad ni de magia alguna sino, por el contrario, de tener predispuestos los recursos humanos y materiales bajo un régimen y un sistema incompatibles con viejos -y desgraciada y  parcialmente vigentes- criterios  burocráticos.

Hay que decirlo, todavía existen quienes no logran entender los nuevos paradigmas, o para peor, que entendiéndolo, de pura mediocridad, siguen cavando trincheras para defender posiciones que jamás ocuparán.

Ya alguien con más sabiduría que nosotros dijo algo así como: «Anoten, anoten, para que sepan con los ….. que tuvimos que tratar…»

Por eso, como dijo Don Domingo: «escribo como arma y medio de combate…», sin importarme, a esta altura, a quien le guste o no.