Cuántos votos se necesitan para ganar

En esta misma columna, el 25 de marzo pasado, realicé un ensayo respecto a la cantidad de votos necesarios para ganar las elecciones a gobernador. Se tomaba como base que iba a votar 460 mil sanjuaninos. Y el frente que llegara a 200 mil votos, ganaría. Como Marcelo Orrego suma casi en soledad, debería estar cerca de esa cifra. Y se decía que en el Frente San Juan por Todos, quien llegara a 120 mil votos, se aseguraría la elección.

Ese cálculo de hace tres meses sigue teniendo plena vigencia para las proyecciones posibles del próximo 2 de julio.

Si bien son escenarios diferentes el del 14 de mayo con el del 2 de julio, empezando que no hay elecciones municipales con todo lo que significa la movilización de los referentes departamentales cuando se juegan su propio futuro, la realidad que los resultados de ese día son un buen punto de partida para el análisis final.

De los 454.507 sanjuaninos que votaron, se consideraron válidos 423.369 votos afirmativos. Y esa es la base del cálculo. Supongamos que vaya más gente a votar y que, descontados los votos de Desarrollo y Libertad y el Frente de Izquierda y de Trabajadores, queden para repartir unos 400 mil votos entre los dos frentes mayoritarios.

Seguiría teniendo plena vigencia el cálculo que el frente que gane, necesita llegar a los 200 mil votos.

En la categoría diputados departamentales, la subagrupación de Marcelo Orrego, obtuvo casi 150 mil votos –los que más sacaron en forma individual- pero poco le sumaron sus otros tres candidatos a gobernador en el mismo frente, para superar los 165 mil votos. Es decir, tendrá que convencer al menos 35 mil sanjuaninos que no lo votaron el 14 de mayo, que ahora lo voten a él o a su frente.

Por otra parte, en el oficialismo sumaron las dos subagrupaciones. Los candidatos de Uñac tuvieron poco más de 136 mil votos y los de Gioja, 85 mil votos. Es decir, Gioja debería sumar unos 30 mil electores que eligieron a los candidatos de Uñac, si quiere ganar.

A Rubén Uñac le alcanzaría incluso sacando un 15% de votos menos que lo conseguido por sus diputados el 14 de mayo pasado.

De los más de 220 mil votos del oficialismo, un porcentaje importante son votantes peronistas. Es decir, Orrego puede cambiarle el voto a los más indecisos, pero no a los que siempre votarán justicialismo. Si alguien que votó a la lista de Uñac en mayo y ahora vota a Gioja, no suma a Orrego, sigue votando oficialismo. Por lo que donde debe buscar Orrego los 35 mil votos que le faltan, no es en el 100% de los 220 mil votantes de los candidatos peronistas, es en un porcentaje mucho menor dispuesto a cambiar radicalmente el voto.

Lo que en la teoría es fácil de explicar, es muy diferente en la realidad.