Economía en “pausa”

En el lenguaje futbolero, la pausa, es una estrategia para dejar “pagando” al marcador o previa a meter un golazo. También se hace la pausa para pisar la pelota, levantar la vista y armar la jugada. Todo en cuestión de instantes. En todos los casos, hablamos de un cambio de ritmo, rumbo, o de frente. Es la transición de una jugada a otra inesperada o sorpresiva.

Si pasamos de futbol, a la economía Argentina, podemos afirmar, que desde el pasado 19 de noviembre, comenzó el tiempo de transición, de una economía neokeinesiana a un modelo anarco capitalista, como lo bautizó su creador y futuro presidente del país, Javier Milei.

A poco menos de 10 días de su debut, todavía son más las dudas que las certezas, sobre lo que viene, aunque podemos ir visualizando algunas cuestiones, que tomaron fuerza en campaña, y que luego cambiaron de prioridad. Estos movimientos, también dejaron en el camino, algunos jugadores que acompañaban al libertario, como el economista Carlos Rodríguez, de CEMA, Emilio Ocampo, autor intelectual de la dolarización y primer funcionario confirmado, el sanitarista Eduardo Filgueira Lima (Secretario de Salud Pública), entre otros, y abrieron las puertas a nuevos jugadores, como Eduardo Toto Caputo, Patricia Bulrich, Osvaldo Giordano; entre otros recién llegados.

Los cambios de nombres, son consecuencia de variación de rumbos. Con la salida de Rodríguez y Ocampo, se desactivó el proyecto dolarizador. Caputo, y su equipo, que los reemplazan, llegan con una propuesta de resolver los pasivos monetarios del Banco Central, fundamentalmente, la bomba de las leliqs, pero también, fortalecer las reservas del Banco Central. Hombres de finanzas, que conocen al detalle, los actores del mercado financiero local e internacional. Las dudas, vienen de la mano de la economía real, que aún, no tiene piloto. Será el mismo presidente, o tendrá un sistema desdoblado, con un responsable de Producción, más orientado a la industria y el comercio, o simplemente será el mercado, el que marque el ritmo proudctivo.

En lo que hace al sector más sensible de la sociedad, la reducción de gastos, no resiste cirugía mayor, sino que la tarea, exige una muñeca de alto contenido técnico, con cintura política. Por eso, sale Píparo, y llega Giordano al Ansess, una de las cajas más pesadas y delicadas de la gestión nacional, y altamente politizadas en los últimos 12 años. La salida de Filgueira Lima, de Salud Pública, se originó en fuertes disidencias con su jefa, Sandra Pettovello, futura ministro de Capital Humano. El sanitarista, de vasta experiencia, proponía un fuerte desregulación del sistema de seguro de salud, con variedad de ofertas de elección para los usuarios. Similar al sistema de Boucher propuestos para educación. Un cambio del paradigma de los servicios sanitarios, pasando del subsidio de la oferta, a la demanda, que resulta un canto de sirenas para el nobel presidente. Sin embargo, hoy no hay certezas de quién conducirá esta cartera, en medio de una crisis profunda del sistema sanitario, y no hay referencias, del rumbo que tendrá esa gestión.

La economía en pausa, nos tiene expectantes y atentos, para ver hacia donde irán las próximas jugadas. El mercado ya dio su voto de confianza, con la baja del riesgo país, y la estabilidad de los dólares financieros. La sociedad, a la espera de las expectativas que ingresaron en las urnas, diez días atrás.